Seguro que más de una vez has escuchado a alguien decir "me da TOC", refiriéndose a una situación que le genera incomodidad o nerviosismo.
En realidad, es incorrecto utilizar dicha expresión porque el Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC) no es una reacción emocional que pueda ser provocada por algo externo. El TOC es un trastorno mental que se caracteriza por pensamientos recurrentes e intrusivos, generando compulsiones que causan un gran malestar y afectan significativamente la vida de la persona.
Decir "me da TOC" de manera casual o humorística minimiza la gravedad del trastorno y puede ser ofensivo para las personas que realmente padecen TOC. Además, el uso indebido de la expresión refuerza el estigma asociado con el TOC y minimiza el sufrimiento que generan los síntomas de dicha condición mental.
El TOC es un trastorno de ansiedad que se caracteriza por padecer pensamientos recurrentes, indeseables y persistentes (obsesiones) que la persona intenta neutralizar mediante comportamientos repetitivos (compulsiones). Las personas con TOC suelen experimentar angustia, ansiedad y malestar significativos debido a estos pensamientos. Pueden pasar horas al día tratando de controlar sus obsesiones y compulsiones, lo que puede afectar gravemente a su calidad de vida.
Las causas subyacentes del TOC no están completamente definidas, pero se cree que pueden ser el resultado de una combinación de factores biológicos, genéticos y ambientales. La investigación sugiere que puede haber una conexión entre el TOC y un desequilibrio en los niveles de serotonina en el cerebro. Además, el TOC puede estar asociado con antecedentes familiares de trastornos de ansiedad, así como con experiencias traumáticas o estresantes en la vida de una persona.
El TOC da lugar a una variedad de comportamientos repetitivos y obsesivo-compulsivos. Algunos ejemplos incluyen:
Tratar con personas que padecen trastorno obsesivo compulsivo (TOC) puede ser desafiante, pero hay algunas cosas que puedes hacer para ayudar a apoyar a la persona y mejorar su bienestar emocional y psicológico.
1.Aprende sobre el TOC:
Lo primero que debes hacer es educarte sobre el trastorno. Conocer los síntomas y las posibles causas del TOC te ayudará a entender mejor la experiencia de la persona que lo padece.
2.Sé empático y compasivo
Las personas con TOC pueden sentirse avergonzadas y estigmatizadas por sus síntomas, por lo que es importante ser respetuoso. Asegúrate de escuchar a la persona sin juzgarla, y sé paciente y amable.
3.No alimentes las compulsiones
Nos puede parecer que la mejor idea es ayudar a la persona a realizar sus rituales o compulsiones, pero esto solo empeora los síntomas del TOC. En su lugar, trata de calmar su pensamiento obsesivo e invítala a recibir ayuda profesional.
4.Ayuda a la persona a buscar tratamiento
La terapia cognitivo-conductual y la terapia de exposición y prevención de la respuesta son los tratamientos más efectivos para el TOC. Ayuda a la persona a encontrar un terapeuta o psiquiatra y a acceder a los recursos necesarios para su tratamiento.
5.Brinda apoyo emocional
Las personas con TOC pueden sentirse aisladas y solas en su lucha contra la enfermedad. Anima a la persona a compartir sus sentimientos y preocupaciones con un profesional de la salud mental.
6.Sé paciente y perseverante
El proceso de tratamiento puede ser largo y difícil para la persona con TOC. Sé paciente y perseverante en tu apoyo y recuerda que el progreso es lento pero constante.
Tratar con personas que padecen afecciones mentales como la depresión, el TOC o el TDAH (trastorno por déficit de atención e hiperactividad) requiere de empatía y sensibilidad, ya que estas no son tan visibles como las enfermedades físicas. Asegúrate de apoyar a la persona cuando necesite pedir ayuda profesional y bríndale apoyo emocional a lo largo de su tratamiento.
Al hacerlo, no solo ayudas al bienestar de la persona, sino que también contribuyes a que los trastornos psiquiátricos dejen de ser tabú en nuestra sociedad.