El marfil, también conocido como "oro blanco", es un material duro y resistente que se extrae de los colmillos de elefantes, morsas y otros animales y que ha sido utilizado en la creación de obras de arte, joyas y objetos de lujo desde hace miles de años.
Sin embargo, la extracción de marfil ha sido una actividad altamente controvertida debido al impacto que tiene en la población de los animales de los cuales se extrae, principalmente de los elefantes. Muchos países han implementado leyes y regulaciones para prohibir el comercio y venta de marfil con el fin de proteger a las especies en peligro de extinción.
El origen del arte con marfil se remonta a la prehistoria, donde se han encontrado objetos tallados en marfil de mamut. El marfil ha sido utilizado para diferentes finalidades a lo largo del tiempo, todas relacionadas con la riqueza y el lujo:
A pesar de las regulaciones y prohibiciones, la demanda de marfil sigue siendo muy alta en algunos países y el comercio ilegal de marfil es una industria multimillonaria. Esto ha llevado a una disminución significativa en la población de elefantes y otros animales, así como a un aumento en la caza furtiva y el tráfico de animales.
En este sentido, en los últimos 40 años la población de elefantes ha disminuido casi un 70%. Estos animales siguen amenazados en sus hábitats naturales fruto de las prácticas ilegales y, su marfil, sigue siendo objeto de comercio ilegal en el mercado internacional.
La industria del arte con marfil se ha convertido en un tema muy polémico en los últimos años. Muchos protectores de los derechos de los animales argumentan que la extracción de marfil es un acto cruel y que su comercialización debería estar completamente prohibida. Sin embargo, algunos defensores del arte comentan que el arte con marfil debería ser preservado, ya que puede ser creado de manera sostenible, extrayendo el marfil de animales que hayan muerto naturalmente.
El arte fabricado con marfil ha sido una forma de arte valorada durante siglos, pero la extracción de marfil ha tenido un impacto significativo en la población de elefantes y otros animales. Aunque la regulación y prohibición del comercio de marfil ha ayudado a proteger a los animales, el comercio ilegal de marfil sigue siendo una industria peligrosa y la controversia en torno al arte con marfil es un tema de debate en todo el mundo.