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Curiosidades y datos sorprendentes de los dientes de leche

Los dientes de leche son el inicio y el punto de partida de toda la formación bucodental del resto de la vida adulta de las personas. Sirven a los niños para aprender a hablar y a masticar, dos cuestiones básicas y fundamentales. Por eso, entre otras cosas, es primordial entender su importancia y su funcionamiento. Aunque se vayan a caer en el futuro, es básico cuidar los dientes de leche de forma adecuada y tratar posibles problemas durante su desarrollo.

¿Sabías que los dientes de leche se forman durante el embarazo? ¿Sabías que solo salen 20? En este post, te explicamos las curiosidades y los datos más sorprendentes de los dientes de leche.

  • Si se van a caer… ¿para qué sirven? Su función principal es ejercer como marcadores de posición para los dientes definitivos. La mandíbula de los bebés es muy pequeña y sería imposible que soportara la cantidad y el tamaño de los dientes adultos. Por eso, hasta que la mandíbula se desarrolla, los dientes de leche hacen como marcadores del camino.
  • Los dientes de leche se forman ya durante el embarazo, habitualmente entre la sexta y la octava semana de gestación. Hasta su erupción definitiva, siguen con su desarrollo dentro de las encías.
  • Normalmente, erupcionan entre los 6 meses y un año. Si, pasado este tiempo, aún no han erupcionado, se puede deber a la ausencia de vitamina D. El caso opuesto no es demasiado habitual, pero también hay ocasiones esporádicas en las que algún niño nace con dientes de leche ya visibles.
  • En total, los dientes de leche son 20, mientras que los dientes definitivos son 32. Generalmente, hasta los tres años no salen todas las piezas.
Curiosidades y datos sorprendentes de los dientes de leche
  • Su proceso de caída se prolonga varios años. Desde los 5 o 6 años hasta los 12 o 13, los dientes de leche se van cayendo de forma paulatina. En este periodo, conviven en la boca algunos dientes de leche con algunos dientes definitivos.
  • Los dientes de leche contienen células madre. De hecho, existen bancos de dientes que conservan dientes de leche congelados a bajas temperaturas para la investigación de diferentes enfermedades.
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  • En ocasiones puntuales, cuando un diente de leche se ha roto o ha salido en una mala posición, es posible que dificulte la erupción de la pieza definitiva. En estos casos, lo ideal es consultar con un odontopediatra para que estudie el caso y recomiende la mejor solución.
  • En los dientes de leche, también es posible que aparezcan caries. Al principio, se manifiesta como una mancha blanca sin brillo. Sin embargo, si esta mancha se reproduce y no se trata de forma adecuada, puede profundizar hasta llegar a afectar a la pieza definitiva. Por eso, desde las etapas iniciales es imprescindible combinar una buena higiene bucodental con revisiones periódicas con el odontopediatra.